Día Mundial de la Meningitis: ¿qué vacunas hay y para quiénes?
La importancia de la vacunación contra la meningitis
La meningitis es una enfermedad grave que afecta al sistema nervioso central y puede causar complicaciones graves e incluso la muerte. Es una enfermedad altamente contagiosa que se transmite principalmente a través de la respiración, por lo que puede propagarse fácilmente entre personas que se encuentren en espacios cerrados, como escuelas o colegios.
La mejor forma de prevenir la meningitis es a través de la vacunación. Las vacunas contra la meningitis pueden proteger contra los diferentes tipos de bacterias o virus que causan la enfermedad, reduciendo así el riesgo de contagio y sus complicaciones.
En este artículo, te contaremos qué vacunas existen para prevenir la meningitis, quiénes deben recibir estas vacunas y cómo mantener tus defensas altas para evitar contraer esta enfermedad.
Vacunas disponibles para prevenir la meningitis
Existen diferentes tipos de vacunas disponibles para prevenir la meningitis, dependiendo del tipo de bacteria o virus que la provoque. A continuación, te presentamos algunas de las vacunas más comunes:
Vacuna conjugada contra el meningococo
La vacuna conjugada contra el meningococo protege contra los diferentes tipos de bacterias de meningococo, incluyendo el serogrupo A, serogrupo C, serogrupo W y serogrupo Y. Esta vacuna es recomendada para niños a partir de los 2 meses de vida, adolescentes y adultos jóvenes, así como para personas con ciertas condiciones de salud que aumentan el riesgo de contraer meningitis.
Vacuna contra la meningitis B
La vacuna contra la meningitis B protege contra la bacteria Neisseria meningitidis serogrupo B, una de las bacterias más comunes que causa meningitis en ciertos grupos de edad, especialmente en lactantes y niños pequeños. Esta vacuna se administra en dos dosis a los 2 y 4 meses de edad, seguidas de un refuerzo entre los 12 y 15 meses.
¿Quiénes deben recibir estas vacunas?
Las vacunas contra la meningitis están recomendadas para diferentes grupos de edad y personas con ciertos factores de riesgo. A continuación, te presentamos quiénes deben recibir estas vacunas:
Niños y adolescentes
Los niños y adolescentes son uno de los grupos más vulnerables a la meningitis debido a su sistema inmunológico en desarrollo y su exposición a diferentes ambientes, como escuelas y colegios. Por lo tanto, es importante que sean vacunados contra la meningitis meningocócica y la meningitis B.
La vacuna conjugada contra el meningococo se administra en dos dosis a los 2 y 4 meses de vida, seguidas de un refuerzo entre los 12 y 15 meses. Además, se recomienda un refuerzo de esta vacuna a los 11 años de edad.
La vacuna contra la meningitis B se administra en dos dosis a los 2 y 4 meses de edad, seguidas de un refuerzo entre los 12 y 15 meses.
Adultos jóvenes y universitarios
Los adultos jóvenes, especialmente aquellos que van a comenzar la universidad, también deben recibir la vacuna conjugada contra el meningococo y la vacuna contra la meningitis B si no recibieron las dosis necesarias en la infancia. Esto se debe a que la meningitis puede propagarse fácilmente en ambientes cerrados como residencias universitarias.
Además, se recomienda un refuerzo de la vacuna conjugada contra el meningococo a los 16 años de edad o antes de comenzar la universidad.
Mantén tus defensas altas para prevenir la meningitis
Además de la vacunación, hay otras medidas que puedes tomar para mantener tus defensas altas y reducir el riesgo de contraer meningitis. Algunos consejos incluyen:
Mantener una buena higiene
Lavarse las manos regularmente con agua y jabón, especialmente antes de comer o después de usar el baño, es fundamental para prevenir infecciones, incluyendo la meningitis.
También se recomienda cubrirse la boca y la nariz al toser o estornudar, preferiblemente con un pañuelo desechable o con el codo flexionado, para evitar propagar gérmenes.
Mantener una alimentación equilibrada
Una alimentación saludable y equilibrada es fundamental para fortalecer el sistema inmunológico y mantener las defensas altas. Asegúrate de incluir frutas, verduras, proteínas y alimentos ricos en vitamina C en tu dieta diaria.
Estar al día con las vacunas
Además de las vacunas contra la meningitis, es importante mantener al día todas las vacunas recomendadas según tu grupo de edad. Consulta a tu médico para recibir las vacunas correspondientes y estar protegido contra otras enfermedades infecciosas.
Evitar el tabaquismo y el consumo excesivo de alcohol
El tabaquismo y el consumo excesivo de alcohol debilitan el sistema inmunológico y aumentan el riesgo de contraer infecciones, incluyendo la meningitis. Evita fumar y moderar el consumo de alcohol para mantener tus defensas altas.
En conclusión, la vacunación contra la meningitis es fundamental para prevenir esta enfermedad grave y potencialmente mortal. Las vacunas disponibles pueden proteger contra los diferentes tipos de bacterias y virus que causan la meningitis, y se recomienda su administración a diferentes grupos de edad y personas con ciertos factores de riesgo. Además de la vacunación, es importante mantener una buena higiene, una alimentación equilibrada, estar al día con las vacunas y evitar el tabaquismo y el consumo excesivo de alcohol para reducir el riesgo de contraer esta enfermedad. Asegúrate de consultar con tu médico para recibir las vacunas correspondientes y mantener tus defensas altas.